Las cintas de tejido son productos ideales para aplicaciones temporales. Pueden adherirse a superficies rugosas, se pueden rasgar a mano y se pueden quitar rápida y limpiamente después de su uso. Cuanto mayor sea el número de mallas del soporte, más dura será la cinta y mayor será su resistencia a la tracción y a la abrasión. El recuento de la malla es una medida de cuántos hilos se cruzan entre sí por pulgada cuadrada de cinta.
Las cintas de tejido son muy versátiles y pueden usarse no solo para aplicaciones de reparación, sino también para enmascarar mientras se lija o al pintar con spray, para agrupación de cables, refuerzo, codificación de colores de cables, sellado permanente de juntas de tuberías, protección contra bordes afilados, fijación y aislamiento de cables.