Menos es más: menos peso, menos costes, menor consumo de combustible y menos emisiones. El uso de la tecnología de cintas adhesivas de tesa® es un claro ejemplo de esta tendencia a la reducción. El motivo de ello es que las cintas se aplican de manera eficiente y, además de adaptarse a las crecientes presiones en lo que a los costes y las elevadas expectativas estéticas respecta, también sirven para cumplir las normas medioambientales y de seguridad de la industria de la automoción, que son cada vez más estrictas.
Al mismo tiempo, los coches —al igual que los smartphones— se están convirtiendo cada vez más en «ordenadores móviles». La creciente digitalización de los vehículos requiere soluciones lean para el diseño de sus procesos internos. Este es otro de los motivos por los que un vehículo nuevo sin cintas adhesivas sería inimaginable hoy día. La gran variedad de productos tesa® ofrece una amplia gama de soluciones, ya que no todas las cintas son iguales. Las características necesarias son muy diferentes en función de su uso en distintas zonas de la carrocería y el habitáculo.